Genealogía

Su reinado

El prestigio de Alfonso III “el Magno” había propiciado que sus hijos fueran accediendo sucesivamente al trono. Se estaba imponiendo el sistema hereditario en detrimento del electivo. Pero a la muerte de Fruela II, varios príncipes consideraron tener derechos suficientes para reinar.

Los aspirantes eran los hijos de Fruela II, los de Ordoño II y Ramiro, último de los hijos de Alfonso III “el Magno”. El primogénito de Fruela, Alfonso Froilaz, fue proclamado por sus partidarios, pero los que apoyaban a los hijos de Ordoño II se opusieron. Estos eran un partido muy poderoso, pues, a través de relaciones matrimoniales, contaban con la ayuda de gallegos, portugueses y pamploneses. En la lucha que se produjo, los hijos de Ordoño II derrotaron a Alfonso Froilaz, que tuvo que refugiarse en Asturias, donde conservaba numerosos partidarios.

Los tres hermanos se repartieron el reino: Alfonso, que había aportado más combatientes, fue coronado rey de León en febrero de 926, Sancho reinó en Galicia y Ramiro gobernó al sur de este reino. En 929 Sancho murió, y los magnates gallegos aceptaron sin problemas el dominio de Alfonso IV.

En la primavera de 930, la muerte de su esposa Oneca hizo que Alfonso IV cediera el reino a su hermano Ramiro y tomara los hábitos en el monasterio de Sahagún. Al poco tiempo se arrepintió de su decisión y salió del monasterio. Aprovechando que Ramiro estaba preparando una campaña para acudir a Toledo en auxilio de los rebeldes al califa Abd al-Rahman III, se apoderó de Simancas y entró en León. Ramiro se presentó rápidamente en León y, después de sitiar la ciudad, la recuperó. Alfonso, huyendo de Ramiro, intentó refugiarse en Pamplona, pero al pasar por Castilla, donde creía tener condes fieles, fue capturado y encarcelado por Ramiro con la ayuda, según parece, del conde castellano Fernán González.

Para evitar la intervención de Pamplona, partidaria de Alfonso IV, Ramiro consiguió la nulidad de su primer matrimonio con la gallega Adosinda, por ser primos carnales, y se casó con Urraca, hija del rey de Pamplona Sancho I Garcés.

En Asturias, los partidarios de Alfonso Froilaz decidieron pasarse al bando de Ramiro. Este entró en la región, cogió prisioneros a los tres hijos de Fruela II y los encerró junto a su hermano Alfonso. A continuación, mandó sacar los ojos a los cuatro.

Una vez asegurado el trono, fue coronado en noviembre de 931 como Ramiro II.

Sucesos contemporáneos

Reyes y gobernantes coetáneos

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