Genealogía

Su reinado

Subió el trono después de estrangular a su hermano Turismundo. Teniendo la necesidad de sentirse apoyado por Roma, y al mismo tiempo siguiendo su inclinación personal y la de sus partidarios hacia el Imperio, firmó en los primeros tiempos de su reinado un foedus que lo comprometía a prestar auxilios militares.

Debido a este pacto, Frederico, hermano de Teodorico II, derrotó en la Tarraconense a los bagaudas, grupos armados que practicaban el bandolerismo.

A la muerte del emperador Valentiniano III, y por la influencia personal de Avito, Teodorico II reconoció como emperador a Petronio Máximo, renovándose el contrato federal. Los visigodos tienen tan afianzado su poder, que a la muerte en 455 del emperador, consiguen que Avito lo suceda.

Debido a que los suevos atacaron dos veces la Tarraconense en 456, los visigodos penetraron en Hispania para ayudar a Roma, aunque con plena dirección de sus tropas. Se enfrentaron cerca de Astorga al rey suevo Requiario, que derrotado se retiró a la costa galaica. Poco después el rey suevo cayó en poder de Teodorico II en Oporto y murió en prisión. Agiulfo fue nombrado gobernador visigodo en la región sueva. Sin embargo, el reino suevo no estaba extinguido y, pese a los intentos de Teodorico II de unirlo al suyo, renació después de la derrota de Requiario.

Teodorico II recibió en Mérida, cuando estaba en campaña, la noticia del enfrentamiento entre el emperador Avito y el magister militum Ricimero. Este era un suevo por parte de padre y visigodo, nieto de Walia, por parte de madre, que venía disponiendo a su antojo de la púrpura imperial. El enfrentamiento terminó con la derrota de Avito, su prisión, su obligada consagración como obispo y su muerte en el 456. Teodorico II dejó en Hispania parte de sus tropas y regresó a Tolosa.

Perdido el interés por ayudar al Imperio, intentó la expansión de su reino, tanto por las Galias como por Hispania. En las Galias ayudó a los borgoñones en una campaña contra la Roma del emperador Mayoriano, que había sido impuesto por Ricimero. Además, Teodorico II intentó por cuenta propia apoderarse de Arlés. En Hispania luchó contra Agiulfo, que quiso hacerse rey de los suevos, y contra el nuevo rey Maldra.

Visigodos y suevos se disputaron la posesión de Hispania al margen de Roma, pero no lo consiguieron pues Mayoriano logró dominar las Galias y romper el cerco de Arlés, consiguiendo que los visigodos hicieran la paz con Roma. El emperador entró en Hispania en el 460 y fracasó en el intento de pasar a África para dominar a los vándalos, pero sí consiguió vencer a los suevos con la ayuda de los visigodos en Lugo y Santarem.

En el año 461, Ricimero asesinó a Mayoriano y nombró emperador a Severo. Teodorico II, que seguía ligado a Roma, aprovechó las luchas intestinas para apoderarse de Narbona en el 462 y ampliar sus dominios con la Novempopulania y parte de la Narbonense I, llamada luego Septimania.

Si en las Galias había conseguido su propósito de expansión territorial, en Hispania no lo logró de modo definitivo, ya que el reino suevo logró recuperarse bajo Remismundo, llegándose incluso a concertar una paz y una alianza matrimonial entre suevos y visigodos.

Teodorico II murió asesinado por su hermano Eurico en el año 466.

Sucesos contemporáneos

Reyes y gobernantes coetáneos

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